Esta preciosa bebé nos hizo pasar un rato de lo más tierno. Su mamá, a la que por suerte ya conocemos desde hace mucho tiempo, no podía parar de sonreír al verla dormidita.
Ya tuvimos la suerte de contar con esta preciosa familia hace años cuando nació su hermanito mayor, Francis, y ahora nos encanta ver a la pequeña Danae en nuestro estudio.
La sesión duró sobre dos horas y media y la bebé se portó genial, fue tan buena que hasta nos sonrió para una foto.
Esperamos que os encante el resultado tanto como a nosotras, y que os animéis a venir con vuestros bebés a capturar estos momentos tan importantes que pasan volando.